Las elecciones de 1992 se caracterizaron por el fracaso de los grandes partidos, producto de la parálisis política, la excesiva deuda y la corrupción del sistema electoral, desvelada por la investigación Manos Limpias, requiriéndose cambios radicales. Los escándalos envolvían a la mayoría de los partidos, pero especialmente en el partido gobernante: la Democracia Cristiana, que …