Apenas 10 minutos para el inicio del partido. Unai Simón demostró personalidad en cantidades industriales en la pasada Eurocopa, cuando se rehizo del fallo grosero ante Croacia que costó el primer gol del encuentro en octavos de final (3-5) y luego se convirtió en uno de los grandes héroes en cuartos de final al detener dos penas máximas en la tanda de penaltis.